COVID19
La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) advierte que las listas de espera quirúrgicas empeoran el estado de salud, suman complicaciones a los pacientes, añaden dificultad a las intervenciones y pueden restar años de calidad de vida a los pacientes. Y lo hace tras la publicación de los datos de listas de espera del Sistema Nacional de Salud de los que se desprende que un total de 706.740 pacientes están en lista de espera para una operación en la sanidad pública con un tiempo medio de espera de 123 días.
Esta cifra, la más alta de la serie histórica iniciada en 2003, supone que los pacientes lleguen a la intervención en un estado de mayor fragilidad, sufrimiento y con peor calidad de vida. Carina Escobar, presidenta de la POP recuerda que “las cifras ministeriales muestran el daño que produjo el parón en seco de las primeras olas de la pandemia, provocando un impacto importante en los pacientes con enfermedades crónicas y aumentado sus necesidades de asistencia”.
En este contexto, con una población cada vez más envejecida y con necesidades crónicas de salud más complejas, destaca un dato: un 43% de los pacientes crónicos empeoraron su salud o sufrieron nueva sintomatología completamente diferente a sus síntomas cronificados (1) desde el inicio de la pandemia. “Esta situación no solo afecta al paciente, también hay que tener en cuenta que supone un coste, pero también sufrimiento y un impacto importante en su vida y en la de su entorno”, subraya.
Retraso en las cirugías e impacto en la sociedad
Además de mejorar las cifras, desde la POP requerimos que los datos de calidad y seguridad de las cirugías sean trasparentes para poder dimensionar realmente el problema. “Conocer las complicaciones postoperatorias de todos los procedimientos quirúrgicos que se realizan en general y en cada hospital en particular es fundamental”, insisten desde la Plataforma. En este sentido, afirman que “sería necesario un proceso más transparente de los datos de resultados de cirugías, complicaciones y éxitos. Auditar y publicar los datos por la Administración Sanitaria de todos los Servicios de Cirugía permitiría conocer objetivamente la realidad, establecer hitos de mejoras y la elección de los pacientes de poder dirigirse a aquellos servicios de cirugía con mejores resultados”.
Pandemia y listas de espera
El aumento de la incidencia acumulada de la COVID-19 y de las tasas de hospitalización y ocupación de unidades de cuidados intensivos de las últimas semanas ha vuelto a ralentizar todos los servicios hospitalarios y las listas de espera quirúrgicas. “Consideramos que gripalizar la pandemia en estos momentos es adelantarse a una situación que no deja de evolucionar y repetirse. El coronavirus SARS-Cov-2 sigue entre nosotros, debemos seguir apostando por medidas como la vacunación, las mascarillas y pruebas diagnósticas de manera precoz, especialmente a personas mayores y/o inmunodeprimidas, con el fin de evitar complicaciones y evitar saturar los servicios de atención primaria y hospitalaria”, resalta Escobar.
Por último, desde la POP señalan que siguen existiendo muchas dudas en cuanto a la cuarta dosis, o segunda dosis de refuerzo, de la vacunación para la COVID-19 en pacientes de alto riesgo (Grupo 7) y mayores de 60 años. “Es necesario definir en qué casos o qué criterio concreto se puede dar lo que ayudaría a mejorar los porcentajes de vacunación y a hacer una comunicación más concreta y de calidad a las personas más frágiles”, concluye la presidenta de la POP.____