Incidencia política
- La POP denuncia la situación de invisibilidad de las personas con enfermedad crónica que no están protegidas en las medidas presentadas por el Gobierno.
- Los pacientes, solicitan medidas concretas para el abordaje de su situación sanitaria, social, educativa y laboral.
- Desde la POP hacen énfasis en el impacto “brutal” que esta crisis está dejando en la salud física y emocional de las personas con enfermedades, además de en los afectados y víctimas por Covid-19.
La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) ha trasladado al Ministerio de Sanidad sus principales preocupaciones relacionadas con la situación de los pacientes crónicos desde el inicio de esta pandemia, durante el confinamiento, y actualmente ante el plan de desescalada, el “Plan para la transición hacia una nueva normalidad”, aprobado recientemente por el Gobierno de España.
Desde la POP reclaman mayor atención e información específica para los colectivos más vulnerables, “las personas con enfermedades crónicas que además de ser más vulnerables a la pandemia necesitan retomar su atención sanitaria”. “El impacto del confinamiento y la inseguridad generada por la infección por Covid-19 está impactando y son preocupantes las consecuencias en la salud que va a provocar el retraso de pruebas, analíticas, tratamientos, cirugías, colonoscopias, etc.”.
Para Carina Escobar, presidenta de la plataforma: “Las personas con enfermedades crónicas van a requerir de una revaluación de su situación, y que se pueda priorizar así las listas de espera, en un escenario que sabemos que va a ser complejo”. “Necesitamos urgentemente protocolos de seguridad diferenciados tanto en hospitales como en centros de salud, donde se garanticen zonas limpias para que puedan acudir los pacientes, y más información y comunicación, que contribuya a la corresponsabilidad de los pacientes, y por supuesto medidas de protección que evite los contagios en pacientes ya vulnerables”, ha asegurado la presidenta de la POP.
Asimismo, tal y como ha trasladado Carina Escobar, “las duras semanas de confinamiento vividas han empeorado en muchos casos la salud de personas con cronicidad, aumentando especialmente el número de ictus o infartos que llegan demasiado tarde a urgencias por el miedo al contagio”.
Desde la Plataforma de Organizaciones de Pacientes reclaman unos protocolos específicos en el ámbito sanitario, educativo y laboral dentro del plan de desescalada, para que los colectivos más vulnerables, citados por el propio presidente del Gobierno durante la presentación de las fases que llevarán a la “nueva normalidad”, estén realmente protegidos.
“Necesitamos saber con claridad cómo deben actuar los padres y cuidadores de niños con necesidades especiales de acceso a atención temprana o rehabilitación”, puesto que “aunque se autoriza la apertura a estas terapias, muchas de las familias acceden a ellas a través de los centros escolares”, ha asegurado Escobar.
También en el terreno laboral, han expuesto la situación de bajas por enfermedad o incapacidad temporal (IT), que reclaman con contundencia para colectivos de riesgo, incluidos profesionales sanitarios, “ante una situación que consideramos que se va a alargar en el tiempo”.
Además, han pedido también medidas de protección individual y test para pacientes crónicos, para sus familias y sus cuidadores. “Las personas con enfermedades crónicas necesitamos una mayor protección sanitaria, por eso pedimos que se nos tenga en cuenta específicamente en la estrategia de salud pública marcada”, ha asegurado la presidenta, quien agradeció que “tras muchos intentos” al fin se esté pudiendo retomar la cooperación con el Ministerio de Sanidad.
“Queremos recordar también la importancia de la protección de personas con enfermedades raras que aún no tienen diagnóstico y, si esta situación se alarga, también se alargará su incertidumbre y sufrimiento”, ha comunicado Carina Escobar. “La dilatación en el tiempo de diagnóstico precoz, o la tardanza en la recepción del tratamiento en la primera fase de la enfermedad, empeora el desarrollo de la enfermedad causando un gran impacto en las personas”, ha explicado.
“Muchos pacientes no están llevando a cabo la adherencia a los tratamientos por el miedo provocado por la cantidad de información que ha trascendido durante la crisis, que en algunos casos les ha llevado a abandonar su tratamiento. Es necesario trabajar en ofrecer una información clara sobre los cuidados de la salud que deben tener”. “Debemos aprovechar la experiencia multidisciplinar en los hospitales para reorganizar la atención de una manera eficaz y eficiente”. Y, por último, la presidenta ha incidido en que “debemos mantener los contactos telefónicos de seguimiento para llevar un control de las personas con enfermedad crónica”.